jueves, 26 de marzo de 2009

LAS FALLAS

Nunca había estado en Fallas, en Valencia, ni en ningún otro sitio la verdad, lo mas que había visto fue por los años 80, quemar muebles en el Retiro, la Noche de San Juan.
Tras hacer varias proposiciones y todas ellas negativas, se lo propuse a Ojos Bonitos, esperando una negativa mas y cual fue mi alegría y sorpresa, que aceptó mi invitación. El plan de acción inicial era el siguiente, salir el miércoles 18, por la tarde, de Madrid, para ver la quema de fallas, pasar la noche y volver tranquilamente el jueves por la mañana, pero la noche de San Patricio, Coli, nos abrió los ojos y nos aclaro que la fiesta era el jueves por la noche y no el miércoles. Por lo que tras pedir disculpas varias a Ojos Bonitos y esperando bronca o charla, ya que ella había pedido la mañana del jueves libre, no se mosqueó por mi torpeza y la propuse salir el jueves a las 4 de la mañana y volver después de la quema de fallas, dijo que tendría que consultarlo. Al día siguiente, me confirmó su agradable asistencia.
Tras una llamada nocturna, para ultimar detalles, me pide que compre tila y así hago, sin tener muy claro para que es la dichosa infusión. A las 4 en punto, salimos de Madrid, ya cerca de Valencia, vemos amanecer en carretera, lo cual como dijo Jackson Brown, es fundamental verlo una vez al año, para ser mas feliz, años hacia que no veía amanecer y la verdad es que es lindo. Llegada a Valencia, la ciudad se esta acostando y tras preguntar a varios feriantes que donde está la playa, ninguno sabe nada, mi compañera de viaje, me pide las pilas, para la cámara. Yo tenia pensado comprarlas el día anterior, pero había tal cola que pase, pero claro yo no tenia pilas y me contesta que yo dije que las compré. Por un momento pensé en telepatía o magia negra, por que yo no mencione nada de mis intenciones de comprar las baterías, aclaración, las pilas, era la tila, un malentendido, veo un kiosco, aparco y pregunto por la playa y las pilas. Solucione ambos problemas y nos fuimos a tomar chocolate, con churros.
Al ir a coger el coche para dirigirnos a la playa vimos un garito con música abierto, entramos y aquello era “Abierto hasta el Amanecer”, tras utilizar los baños Ojos Bonitos, salimos zumbando antes de que nos devoraran tantos vampiros.
Buscando la playa, con mi “gran sentido de la orientación” tuvimos que preguntar alguna vez mas y harto de conducir, hasta tuve que poner mi bólido en dos ruedas para esquivar obstáculos, tras situarnos en la playa, fuimos al centro de la ciudad a ver mas fallas, de nuevo mi orientación me jugó una mala pasada y acabe en dirección contraria, en una avenida grande topándome de frente con la autoridad municipal, al cual le dije “agente creo que me he equivocado” a lo que me contesta “ya lo veo” Ojos Bonitos rompe a reír y suplico que no se ría, excusándose en que no se puede aguantar sigue con sus risas, me pongo nervioso y marcha atrás me doy 2 veces con el bordillo, pena le doy al guardia y se pone tras de mí para permitirme salir del embrollo. Ya directo a la playa, nos cambiamos dentro de una chilaba (gran utilidad aparte de disfraz) y nada a tomar el sol y sufrir el levante. Ya nos decidimos a ver la mascletá, debido a no conocer bien, los medios de locomoción llegamos a en punto y la tuvimos que oír desde la lejanía al ser imposible acercarnos mas. Buscamos un sitio para comer y tras mucho patear, acabamos en una terraza agradable. Tras la comida siesta en el Hotel C3, al borde del paseo marítimo y al anochecer a ver mas fallas y la cremá. Cogimos un buen sitio para ver la quema de la falla del ayuntamiento y los fuegos artificiales, aunque la policía municipal, nos hizo retroceder por medio de un cordón pensé en una manifestación en que la policía nos separaba y pedía a Dios que no me topara con el agente de la mañana.Debido al cordón policial acabamos con un grupo de jóvenes extranjeros, que por un megáfono gritaban sin parar “Atleti, atleti, lalalalala lalala “ uno era búlgaro y el otro parecía ingles. Estaban con unas chiquillas bebiendo, atención, Larios a palo seco, que heavy, una de las muchachas, me pregunto que si era español de España, tras mí afirmación me hizo alguna pregunta gramatical y luego me dijo que decíamos en las fotos, yo conteste que pa-ta-ta y al ver el acento porteño de la muchacha, dije “los gringos dicen chees” a lo que me contestó, “yo soy gringa” pensé yo, que la había armado y dije que de donde “Chicago” contestó. Al conocer está ciudad ya acabo la tensión y nos pregunto nuestra procedencia Madrid y Sao Paolo contestamos, alabo la lengua portuguesa y Madrid, maldijo Toledo, que era su residencia actual, por no gustarle sus gentes. Había otra giri, con gran altura y un sombrero colorado, que filosofaba con la chica de Chicago, lo bien que se lo estaba pasando, gracias a ella y poco mas que la debía la vida casi (esto me lo tradujo Ojos Bonitos, claro) al poco rato la muchacha del sombrero, pisa a una latina de uno sesenta mas o menos, con la botella de Larios en mano, disculpándose “Lo siento, amo a España y los Españoles, les adoro a todos, me encanta todo.......” así alzando cada vez mas la voz con la botella y una gran altura, la muchacha latina, se estaba encogiendo acojonada, por lo que pudiera pasar, al final vimos la quema de la falla, los fuegos, cantamos, chillamos y muy bien. Tras pasarlas putas para salir de la plaza, con el himno de Valencia y luego el de España de fondo, cogimos el rojo lucifer y a casa.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

¡Como tienes el sonajero!

Yo.

colombo dijo...

Gran viaje y muy bien contado.