jueves, 20 de noviembre de 2008

DE TODO UN POCO








Muchos días he estado sin escribir nada en este gran blog, ruego que los seguidores de él puedan disculparme, pero he tenido que dar entrenamiento al personal y hacer obras por lo que no he podido contaros diversas aventuras.




Empecemos por el deporte rey, no es el fulbol, como dice el Sr. Villar, si no el deporte de villanos jugado por caballeros.




Ganamos a Alemania 22-11, buen partido del XV del León aunque quedo claro que somos superiores, a pesar del 0-3 a los 2 minutos. Gran partido del debutante Camille Riu, con 17 puntos y ahora a esperar, al mes de febrero para jugar contra Rumania.




La Fiorentina como siempre (parece el pupas italiano) en tierras Sardas ante el Cagliari, perdió 1-0 de penalty injusto, fallo Gilardino lo que no estaba en los escritos y no nos pitaron un penalty claro a favor, Montolivo parece ser el mismo de otros años.




Hoy también en el Rincón del Pollito, hablaremos de un clásico, El Urogallo de la Casa de Campo, pulmón de Madrid.




No hay como comer en una grata compañía (ver foto, es autentica) en un lugar dentro de la naturaleza con las vistas a un laguito, es lo que te ofrece El Urogallo. Comida de calidad y abundante, se tercio una comida a eso de las 14:30, sin reservar. Yo tenia el propósito de quedar bien y se me ocurrió este restaurante situado en el Lago de la Casa de Campo, pedimos pulpo y carne para dos.




Pedí un vino de la casa, Viña Berceo Crianza, no recuerdo el año porque estaba atontado con los ojos que tenia frente de mí; con el vino mientras nos llegaba el pulpo, un plato de chistorra para hacer tiempo, fue el primer bocado que llego a nuestro paladar. Llegó el pulpito a la gallega, eso pone en la carta. ¡Impresionante! era un señor pulpo, blando, blando con unos exquisitos cachelos, que no lo acabamos, por su magnitud.




De segundo, carne. Chuletón de Carne Roja a la Parrilla, en fin ese invento de hacértelo tu, nunca me ha gustado mucho, por el humo y menos aun al ser el que paga, la carne estaba muy rica (no tanto como lo que había frente a mí) y como estaba tonto con la compañía (no las patatas y los pimientos de Padrón) la chicha me gusta poco hecha, pero como diría el Gran Pepiño estaba abducido y se me pasaba la carne una y otra vez, también sobro casí la mitad y Clarita me lo agradeció.




Muy educada mi acompañante, pidió té de postre y sabiendo lo que yo me decía, por conocer dicho restaurante, la invite a tomar una tarta de manzana a medias. Dios mio me estoy quedando ciego, un hojaldre de manzana, sobre una base de natillas con adornos de chocolate líquido en forma de telaraña, se posaba en el centro. Como decía mi ceguera es tal que los adornos de natillas y chocolate, era el decorado del plato, que fuerte, muy rica la tarta pero no es la misma de antes, ahora la sirven caliente y es mas sutil su crema.




Un servidor tomo café solo, bueno, no, con azúcar y cucharilla.




Salí contentisimo y embaucado por la conversación de la comida y la belleza que tenia frente a mi total que da igual lo que me cobraron y si estaba bien o mal la comida, aunque esta estaba bastante bien y ambos salimos muy contentos.




Mañana intentare escribir la previa de la jornada de rugby, la sexta jornada.




Adiós, intentare ser mas responsable en este mi blog

3 comentarios:

Anónimo dijo...

¡Como tienes el sonajero!

Yo.

colombo dijo...

¡Viva el pollito!

Mascherato viola dijo...

Si la envidia fuera tiña...........